- Biocombustibles sostenibles: Son los combustibles líquidos producidos a partir de biomasa, que cumplen los estrictos criterios de sostenibilidad de la regulación europea.
- Combustibles sintéticos: Vienen del agua y del aire. Se captura el dióxido de carbono de la atmósfera o de un proceso industrial y se combina con hidrógeno obtenido a partir de agua. Lo llamamos hidrógeno renovable porque el proceso está completamente libre de emisiones al usar energía eléctrica renovable.
- Biocombustibles avanzados: Se fabrican principalmente con residuos biológicos que pueden venir del entorno agrícola o forestal. El carbono y el hidrógeno están presentes de manera natural en estos materiales, que se refinan para obtener carburantes.
- Otros combustibles bajos en carbono: Otras materias primas provenientes de residuos de origen no biológico (ej. Residuos urbanos o plásticos) también susceptibles de ser convertidas en ecocombustibles.
El ecocombustible será apto para cualquier tipo de vehículo, así que no será necesario cambiar de coche para contaminar menos.
No, no será necesario fabricar nuevos motores ya que los ecocombustibles son aptos para los actuales motores de combustión. Dicho esto, las mejoras en la eficiencia de los motores contribuirán a la disminución del consumo y, por tanto, de la huella ambiental.
No, los ecocombustibles son compatibles con cualquier vehículo y cualquier motor. Nos dirigimos hacia las refinerías del futuro, en las que los ecocombustibles procesados van a cumplir las especificaciones de la industria automovilística.
El precio dependerá de múltiples factores, como la demanda del mercado, el precio de las alternativas, los impuestos aplicados y los programas de ayudas gubernamentales. A día de hoy la mitad del precio de los combustibles son impuestos, por lo que el coste dependerá en gran medida de las políticas fiscales que se lleven a cabo en relación con esta alternativa.
El precio de los ecocombustibles estará basado en cuatro factores:
- Los tipos fiscales, ya que aproximadamente la mitad del precio de los combustibles son impuestos.
- La disponibilidad de las materias primas necesarias para su elaboración.
- Conseguir que el desarrollo tecnológico sea competitivo.
- La ley de la oferta y la demanda.
Según el último informe de Concawe sobre la transición hacia los ecocombustibles para 2050[1], se prevé una potencial disponibilidad de materias primas sostenibles que oscila entre 210-370 Mega toneladas equivalentes de petróleo/año para todo el sector de la bioenergía de aquí a 2050, sin que se prevea un impacto perjudicial para la biodiversidad. Pero, además, otras materias primas sostenibles y materiales de desecho actualmente no incluidos en el anexo IX de la RED II, como las algas, podrían ofrecer la oportunidad de aumentar este potencial.
[1] https://www.concawe.eu/wp-content/uploads/Rpt_21-7.pdf
Tanto la regulación europea como la nacional incorporan estrictos criterios de sostenibilidad para los ecocombustibles, que incluyen la prohibición de emplear materias primas que supongan riesgo de deforestación o que se cultiven en tierras con altas reservas de carbono. El cumplimiento de estos criterios debe ser verificado por entidades independientes. Además, para la producción de ecocombustibles se va a emplear como materia prima un volumen creciente de residuos de todo tipo (agrícolas, forestales, industriales, plásticos, ..), que no compiten con las materias primas para uso humano o animal.
Sí, de hecho ese es uno de los objetivos. La introducción de los ecocombustibles en el mercado va aparejada de la reducción de la dependencia del petróleo, que es importado. La producción de los ecocombustibles se realizaría en España y Europa, con materias primas autóctonas, por lo que su progresiva implantación tiene una relación directa con la reducción de dependencia energética del exterior de la región.
Cada tipo se encuentra en un punto distinto de desarrollo. Los combustibles sintéticos aún están en fase piloto de demostración industrial, en cambio, algunos biocombustibles ya se han introducido en el mercado. La primera generación de biocombustibles, aquellos creados a partir de cultivos alimentarios, es la más extendida. Para los biocombustibles avanzados, la materia prima es de origen biológico, mayoritariamente residuos (lípidos, forestales, etc.). Este tipo también está ya desarrollado y en uso, aunque en menor proporción que los anteriores. La segunda generación de biocombustibles es la opción preferida y a la que se tenderá debido a su mayor sostenibilidad.
Los ecocombustibles ya están en el mercado integrados con las mezclas que actualmente se realizan en las refinerías para la producción de combustibles. Su proceso de incorporación va siendo marcado por las leyes en esta materia. El Real Decreto 205/2021, de 30 de marzo, establece un objetivo obligatorio mínimo de venta o consumo en biocarburantes con fines de transporte del 9,5% en 2021 y del 10% en 2022.
Para 2023, está previsto que esté en marcha el proyecto de biocombustibles avanzados en la refinería de Cartagena. Asimismo, para 2024 en la refinería de Bilbao ya estarán operativas las instalaciones de la que será una de las mayores plantas de combustibles sintéticos a nivel mundial.
Los ecocombustibles ya se están incorporando a la gasolina y el gasóleo que hoy repostamos , reduciendo así su huella de carbono. Los biocombustibles se están integrando con las mezclas que se realizan en las refinerías para la producción de combustibles. Se irá incrementando la proporción de biocombustibles hasta que estos sustituyan por completo a los combustibles convencionales. En este sentido, el usuario no notará dicha transición y no sufrirá ninguna molestia por el cambio, ya que ni tan siquiera tendrá que cambiar de coche al ser los ecocombustibles compatibles con cualquier motor de combustión.
Estamos en condiciones de que en 2050 o antes cada litro de combustible que salga de las refinerías sean cero emisones.
Las refinerías son un elemento clave en la producción de los ecocombustibles, ya que se convertirán en centros de intercambio de energía y de materias primas, además de adoptar el rol de sumideros de residuos completando así el ciclo de economía circular. Esta actividad tendrá un impacto económico especialmente positivo en las zonas con refinerías: A Coruña, Bilbao, Tarragona, Castellón, Puertollano, Cartagena, Huelva y Cádiz.
La necesidad de integrar actividades agrícolas, forestales e industriales para el procesamiento de residuos colocará a la España rural en una posición fundamental en la producción de ecocombustibles. En el caso de residuos urbanos, se integrará en el proceso a las administraciones locales.
La neutralidad de emisiones de carbono es el balance cero entre el CO2 que se emite y el que se retira de la atmósfera, llegando incluso a poder tener emisiones negativas. Los ecocombustibles van a contribuir a alcanzarla porque durante su producción se captura y reutiliza CO2, llegando incluso a emisiones negativos.
Dependiendo del tipo de ecocombustibles el proceso es distinto:
- Biocombustibles: la biomasa utilizada captura CO2 de forma natural mediante la fotosíntesis.
- Combustibles sintéticos: se captura el CO2 de la atmósfera, o bien directamente en las “chimeneas” de las industrias, o bien el disperso en el aire.
Sí, va a ser posible y, de hecho, necesaria. Para determinados tipos de movilidad, como la aérea o la marítima, los ecocombustibles son hoy la única opción. Además, la posibilidad que ofrecen los ecocombustibles de reducir emisiones sin cambiar el vehículo facilita una transición ecológica justa y eficiente hacia la neutralidad climática, que incluya a todos los ciudadanos, independientemente de sus recursos económicos.
Nos encaminamos al desarrollo de una red logística multienergética. La red de repostaje que existe en todo el territorio nacional, la red de estaciones de servicio, será adaptada para permitir no solo el suministro ecocombustibles sino también de otros servicios, como la recarga eléctrica.
El cambio climático afecta a todos los ámbitos de la sociedad y la economía, por lo que tiene que abordarse desde todos esos sectores. Según el Parlamento Europeo, el transporte es el responsable de más del 30% de emisiones de CO2 en la Unión Europea, y de ellas, el 72% es del transporte por carretera. Por tanto, es uno de los principales focos de emisión que hay que reducir. Con los ecocombustibles se produce un cambio en la fuente de energía, y esto va a permitir tener emisiones netas 0.
Para lograr una máxima penetración de los ecocombustibles en la UE se calcula entre 30 y 40 mil millones de euros para los primeros 10 años, mientras que el importe total para ejecutarla completamente antes de 2050 se estima que sea de entre 400 y 650 mil millones.